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¿La pantalla digital interactiva en clase de primaria, beneficiosa o peligrosa?

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Es una idea ampliamente compartida que “las pantallas” son perjudiciales para los niños. Frente a esta opinión persistente, tanto los profesores como los padres suelen sentirse divididos entre las enormes posibilidades que ofrece la pantalla interactiva en clase y el deseo de hacer del aula un espacio sagrado que ofrezca, por su parte, una pausa digital.

¿Está justificada esta sensación de peligro asociada a “las pantallas”? ¿Se han realizado estudios que respalden esta percepción tan generalizada? Hemos encontrado el informe “LAS PANTALLAS”: ¿un verdadero peligro para el aprendizaje de los alumnos? publicado en el sitio de Canopé en marzo de 2024 y redactado por profesores de la Universidad de Franche-Comté. Este informe hace un balance de la situación y, en cierto modo, pone los puntos sobre las íes.

Atención, una pantalla puede ocultar otra…

Al igual que en el informe mencionado, hemos procurado hasta ahora poner “las pantallas” entre comillas, ya que las “pantallas” tan a menudo señaladas engloban una gran diversidad de herramientas digitales con usos muy diferentes. ¿Tiene el mismo impacto una pantalla de televisión, una tableta, un smartphone o una PDI sobre el rendimiento escolar? La respuesta es muy probablemente que no.

Esta facilidad de lenguaje que consiste en englobar un conjunto de herramientas digitales bajo la vaga terminología de “pantallas” oculta, en realidad, una falta de reflexión metódica y rigurosa sobre el tema, ya que al decir “pantallas”, no se sabe muy bien qué se está acusando, ni de qué.

Por eso el informe llama a tener más metodología en nuestra reflexión sobre las herramientas digitales en el ámbito educativo, y acusa a los medios de aprovecharse un poco demasiado de estudios alarmistas con una calidad metodológica cuestionable.

“En contraposición a esos mensajes impactantes, la literatura científica subraya la complejidad del vínculo entre lo digital y el aprendizaje, y la necesidad de adoptar un análisis preciso y contextualizado de los resultados, teniendo en cuenta la naturaleza de las herramientas (por ejemplo, televisión vs tableta), el tipo de uso (por ejemplo, activo vs pasivo), las características de los niños (por ejemplo, entorno social de origen) y las prácticas pedagógicas, con el fin de identificar los verdaderos beneficios y límites de las herramientas digitales para la educación.”

Nuestros prejuicios sobre las herramientas digitales y el aprendizaje puestos a prueba por la metodología científica

Para evitar cualquier “sesgo de confirmación” que nos lleva a confiar más en los estudios cuyas conclusiones validan nuestras propias convicciones, este informe se basa en lo que se llaman “revisiones sistemáticas” * y “metaanálisis” **.

El alumno, de nuevo en el centro de su aprendizaje gracias a lo digital

Los resultados están lejos de los que imaginan los más pesimistas, ya que en general son positivos y alentadores, con experimentos que ponen de relieve, en particular, los beneficios de la herramienta digital para los alumnos con necesidades especiales “al ofrecer un aprendizaje diferenciado, adaptado al nivel de cada alumno, con una progresión en los ejercicios y explicaciones y retroalimentación adaptadas.”

¿Eres profesor(a)?

Si enseñas o si das clases a alumnos con necesidades especiales y quieres compartir tu experiencia en nuestro blog, este tema nos interesa muchísimo y estaríamos encantados de recoger tu relato en un artículo. ¡Puedes escribirnos a marketing@speechi.com!

El segundo aspecto destacado en el informe – y que es particularmente valioso para el aprendizaje – es la interactividad de las herramientas digitales, como la PDI, que hace que el alumno esté “más activo en su aprendizaje”:

“La interactividad que ofrecen las herramientas digitales favorece la exploración y el uso de estrategias de resolución de problemas, y, en última instancia, la adquisición de competencias.”

* Las revisiones sistemáticas “sintetizan los resultados de todos los artículos científicos que abordan una problemática específica, seleccionados en función de su calidad metodológica”. (↑)

** Los metaanálisis “proporcionan un resumen estadístico de todos los datos de la literatura científica y cuantifican la magnitud del efecto de un factor sobre una conducta” (↑)

👉 Lo que puedes retener

Aún queda un amplio campo de estudio por explorar en el contexto del aula para desmontar ciertas creencias sobre las “pantallas” y medir los beneficios y límites reales del uso de herramientas digitales en clase.
Una herramienta digital no es mala ni buena en sí misma. Más bien, es el contexto de uso y su integración en un enfoque pedagógico claro lo que hace interesante y beneficiosa su utilización en clase.
Una pantalla interactiva no es una pantalla cualquiera. Se trata de una herramienta utilizada en el contexto particular del aula, con un uso que queda a discreción del profesor, según sus proyectos pedagógicos, su sensibilidad o su afinidad con la tecnología.
El beneficio para ciertos niños con necesidades especiales de herramientas digitales como la PDI está demostrado tanto por algunos estudios como por experiencias reales de profesores en clase.